Aunque no todos contamos con grandes espacios para un jardín, siempre existen alternativas creativas para disfrutar del arte de cultivar. La jardinería es terapéutica y puede practicarse en patios, techos, paredes, jardineras, balcones o incluso en casa de un familiar o en áreas comunes.
Antes de comenzar, es importante medir el área disponible (largo y ancho). El tamaño del jardín dependerá del tipo de diseño que se desee: jardineras, áreas para caminar, terrazas o espacios mixtos. Con estas medidas podrás definir dónde irán las plantas, el césped, los caminos o los maceteros.

Una vez tomadas las medidas, divide el espacio por necesidades:
Dibuja un pequeño plano para visualizar mejor cada área antes de visitar el vivero.

Un jardín requiere disciplina:

Los accesorios dependerán del tamaño del jardín:

Escoge las plantas según el clima, la luz disponible y tus gustos: árboles, palmeras, arbustos, rosales, trepadoras, cactus, suculentas, aromáticas, acuáticas, frutales y hortalizas. Considera siempre si requieren sombra, sol, frío, calor o mucha agua.

Las plantas pueden ser económicas, especialmente si compras semillas o si deseas cultivar desde cero. Los jardines instantáneos requieren mayor inversión porque incluyen plantas ya florecidas.

Con las zonas, especies y elementos listos, llega el momento de darle estilo. Los jardines se pueden clasificar en:
Todo dependerá de la personalidad del espacio y de lo que quieras transmitir.





Con cariño,
Carolina