Te damos ideas prácticas y elegantes para decorar tu casa con el color del año: Classic Blue, un tono fuerte, energético y lleno de personalidad que recuerda al mar y transmite calma y profundidad.
El azul puede intimidar a la hora de decorar porque se convierte rápidamente en un punto focal. Por eso, es importante elegir bien las combinaciones. Lo ideal es usar menos de cuatro colores: el Classic Blue como protagonista, un tono que complemente, un metálico para detalles y un color base (blanco, negro, gris o crema) para equilibrar.

Las texturas también añaden interés, siempre que se mantengan proporciones y patrones coherentes. El Classic Blue luce mejor cuando se usa en detalles minimalistas, permitiendo que su fuerza destaque sin recargar el espacio.

Si no deseas hacer un cambio drástico, puedes crear una “intervención azulada” con elementos simples: cojines, flores, cuadros, alfombras, una lámpara o un jarrón. No tienes que irte al típico estilo marítimo; puedes optar por geometrías, contrastes y diferentes materiales para romper el esquema.

Para los amantes de la naturaleza, las flores y plantas son perfectas para dar vida y realismo. Funcionan muy bien combinadas con tonos azules en mesas, paredes o accesorios.

Este color también permite cambios rápidos y notables: un solo mueble azul, una pared de impacto o cojines contrastantes pueden transformar por completo un espacio.

¿Quieres todo azul? También es posible. Solo cuida la iluminación para evitar que el ambiente se torne muy oscuro. Mezcla luces cálidas y frías y juega con materiales como madera, metales o fibras naturales para dar movimiento y profundidad.

Con cariño,
Carolina García